El titular de Grand Parts y miembro de la comisión directiva de CARVA, Mariano Bonato, explicó que “con mis compañeros estuvimos trabajando durante varios meses en conjunto con gente del estado nacional y se logró destrabar esta ley que, por una regulación vieja de hace 20 años, decía que únicamente se podían utilizar y comercializar 30 piezas de un vehículo, siendo que tienen aproximadamente 40.000”.
En otras palabras, aseguró que “esto representaba una cifra de 60 mil millones de pesos que se estaban desperdiciando”, pero esta nueva normativa “permitirá reinsertar esa cantidad de piezas, que ahora van a poder ser utilizadas por cualquier persona en la República Argentina, ya que se podrán comercializar 142 autopartes”.
Según precisó, estas piezas “representan el 80% del vehículo”, teniendo en cuenta que “ellos cuentan un motor, por ejemplo, como una sola pieza, siendo que adentro del mismo hay múltiples partes que lo componen”.
Debido a esto, reconoció que “traerá muchos beneficios para la economía de la Argentina, de nuestra provincia y de nuestra ciudad”, dado que “se necesitará una inmediata incorporación de mano de obra para poder administrar esa cantidad de piezas, que son muchísimas, para poder establecer un orden, almacenamiento, cargarlas en el sistema y publicarlas”.
Por último, Bonato consideró que “uno de los problemas principales y una de las causas por las que el gobierno se mantuvo firme y quiso dar una respuesta inmediata” ante esta problemática fue “el mercado negro”, ya que “la ley anterior estaba fomentando este tipo de comercialización, porque decía que nosotros teníamos que destruir las piezas descartadas y, en el contexto de la Argentina, había escasez de repuestos y a las personas no les quedaba otra que recurrir al mercado negro”.
Fuente; Diario Río Uruguay